Estos son los mejores ejercicios para prevenir trombos en la pierna

2022-12-02 19:08:56 By : Mr. Henghai TOMKING

La última hora de la Selección Española y el resto de países, en directo

Estos son los mejores ejercicios para prevenir trombos en la pierna

La actividad física es esencial para tener una vida saludable y evitar enfermedades, de hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar un mínimo de 150 minutos semanales de ejercicio para evitar llegar a desarrollar problemas de salud o agravar algunos existentes. La actividad física moderada combinada con una buena alimentación y la eliminación del alcohol y el tabaco contribuirá a mejorar el sistema muscular y cardiorrespiratorio y la salud ósea.

En el caso de padecer trombosis venosa -coágulos de sangre que interrumpen el flujo sanguíneo normal- la actividad más sencilla y eficaz es caminar, un acto que no supone mucho esfuerzo y que está al alcance de todos. Si se ha padecido una enfermedad tromboembólica venosa lo recomendable es hacer este ejercicio sin forzarse y parar si aparecen molestias o cansancio, tal como señala la Fundación para el Estudio de la Enfermedad Tromboembólica.

Los síntomas de esta enfermedad son hinchazón en la pierna afectada (rara vez aparece en ambas piernas), dolor en la pierna que generalmente empieza en la pantorrilla como un calambre o inflamación, enrojecimiento o decoloración de la pierna o sensación de calor en esta.

Si manifiestas alguno de estos síntomas es importante acudir al médico para evitar complicaciones, ya que el coágulo podría desprenderse y desplazarse a través del torrente sanguíneo y causar un problema serio en los pulmones conocido como embolia pulmonar, un infarto o un derrame.

Además de caminar, existen ejercicios concretos para evitar la aparición o agravamiento muy fáciles de hacer en casa que, si se realizan de manera frecuente, ayudan a mejorar la circulación de la sangre.

- Sentarse en una silla con las rodillas a 90º y separar y juntar las puntas de los pies varias veces.

- También en la silla, se realizan movimientos laterales de las piernas, elevándolas a la misma altura. En esta posición, se mueven los dos pies al mismo tiempo o por separado hacia delante y hacia atrás (simulando pisar un acelerador), alternando las piernas. Asimismo, se mueven los pies en sentido de las agujas del reloj y en sentido contrario.

- Tumbarse en una esterilla o en la cama y pedalear boca arriba en el aire. Otra opción consiste flexionar y extender los dedos de los pies con las piernas levantadas y estiradas.

- Colocar una almohada o pelota entre las piernas, y ejercer a continuación una leve presión durante unos seis segundos con las dos piernas hacia dentro.

- Llevar una pierna al pecho sosteniéndola con las manos y manteniendo la rodilla flexionada mientras la otra permanece estirada en el suelo. Se pueden hacer varias repeticiones de unos 30 segundos cada una.

- Colocarse de pie y con la espalda recta. Acto seguido ponerse de puntillas y bajar lentamente, repitiendo este movimiento varias veces.

© Mundo Deportivo. Todos los derechos reservados.